El orgullo de tener sustitutos

Xavier Marcet:

Este podcast es posible gracias a Inusual, una comunidad de líderes que no solo hablan de cambio, sino que lo practican. Porque liderar no es hablar de transformación, es atreverse a encarnarla. Soy Xavier Marcel, y te doy la bienvenida a mi podcast. El orgullo de tener sustitutos. Tener alguien que te pueda sustituir una o varias personas es un orgullo, un orgullo, no es una amenaza.

Xavier Marcet:

Es el resultado de haber hecho las cosas bien. Además, es la oportunidad que tienes de continuar creciendo. Si apostamos por una cultura de crecer haciendo crecer, lo sensato es pensar en hacer crecer a nuestros sucesores, en general a toda la gente de nuestros equipos. Incluso cuando no pensamos en dejar una responsabilidad, hay que revisar nuestras agendas, repartir juego, repartir otra vez las cartas para que todos podamos crecer. No podemos olvidarnos de cuando éramos aspirantes, no podemos olvidarnos de aquellas nuestras ansias por demostrar nuestra aportación e implícitamente nuestro talento.

Xavier Marcet:

Una organización a la que la gente no tiene aspiraciones es una organización enferma. Una organización donde la gente se da a codazos por medrar, también está enferma. Necesitamos gente con voluntad de responsabilidad, con voluntad de liderar, tenemos mucha gente corriendo la banda. Lo único que debemos asegurarnos es que entiendan toda esta gente que liderar es servir, no servirse. Que haya gente corriendo la banda con ganas de entrar en el partido nunca es malo, nunca.

Xavier Marcet:

Nuestro trabajo es cuidar el futuro dando resultados en el presente, that shed. Propiciar con los resultados de hoy el futuro de nuestras organizaciones y ser capaces de construir y concretar las nuevas oportunidades. Y si jugamos un papel de liderazgo, nuestra responsabilidad es crear nuevos líderes. Líderes que crean líderes, remostecer nuestra cadena de responsabilidad y de inspiración con gente que se ponga al servicio de los demás y quiera asumir el el privilegio de la complejidad. Estar en los lugares de decisión es aprender a disfrutar tomando decisiones difíciles.

Xavier Marcet:

Aprender a decidir sin necesariamente dejar de dudar, aprender a enfrentar los problemas, además de los problemas. Lo que no es de recibo es esa gente que medra para poder tener poder, y luego no es capaz de entender que la gente no trabaja para él, sino que cuanto más arriba estás, eres tú el que trabajas para la gente. Tener responsabilidad es disponer del privilegio de servir más, de poner los recursos y la influencia al servicio de algo que valga la pena, de un propósito que nos trascienda, de algo que se oriente a un legado realmente ilusionante. Necesitamos forjar una cultura de lo que significa la responsabilidad y el liderazgo. Nuestras escuelas de management deberían formar más a la gente para el servicio que para la ostentación.

Xavier Marcet:

Preparar a la gente para asumir altas responsabilidades, esquivando la arrogancia y la autocomplacencia, líderes que crearán líderes, que pensarán en quién les puede sustituir y lo verán como parte de su legado. Líderes que no cejan hasta tener alrededor personas que actúan como contrapuntos solventes. Los contrapuntos son esa gente que, desde la lealtad, nos pone en nuestro sitio si un día perdemos la humildad. Esa gente que sabe mostrarnos la otra cara de la luna. Esos extorcistas del egocentrismo, militantes del sentido común, los que nos expresan sus reservas, sus dudas, sus intuiciones desde la lealtad.

Xavier Marcet:

Los buenos contrapuntos nos hacen preguntas que días después continuamos recordando. Y esto es posible, claro que es posible. Lo he aprendido de mucha gente, por ejemplo, de Begonia Gask, de la fundación Allinda, una fundación para jóvenes que ofrece nuevas oportunidades a los que quemaron todas las oportunidades muy temprano, o a los que nunca llegaron a tenerlas. Begoña es una líder que busca el contrapunto, que no se escuda detrás de un propósito que sin duda es extraordinario. Sirve con un coraje indómino, indómito desde la humildad, sirve desde un coraje indómito desde la humildad, su legado será inmenso, inmenso.

Xavier Marcet:

También lo aprendió a Mateo Valero, 1 de los grandes de la arquitectura de computadores del mundo, que podría estar escribiendo la altivez de su conocimiento inmenso y en cambio, solamente nos traslado a la sabiduría de quien nunca abandonó la sencillez y la cercanía. Lo he aprendido de muchos líderes empresariales, que se sienten verdaderos servidores de su comunidad profesional y de sus clientes. He encontrado muchas pymes de origen familiar, pero también, tengo que decirlo, en algunas grandes corporaciones. Todos ellos son gente que nunca cayeron en la ostentación. La ostentación es la enfermedad infantil de los pusilánimes.

Xavier Marcet:

Hay un hay un triángulo, hay un triángulo que mueve montañas, talento, pasión, esfuerzo, pero también hay un triángulo que lo destruye todo, tontería, altivez, ostentación. La vista de gente que no responde a este perfil que les estoy hablando debe ser inmensa. También, yo también conozco a activos empresarios que usan el poder para ambiciones propias, sin duda, los conozco, y también conozco gente muy tóxica que se esconde en organizaciones que tienen propósitos muy nobles. También conozco arrogantes del conocimiento que nunca pasarán de ser unos expertos estirados, y que, y que. Lo importante es quién escogemos para inspirarnos.

Xavier Marcet:

¿Cómo sabemos rescatar de nuestra trayectoria a aquellos que nos moldearon para crecer y para servir a los demás? Muchos encontrarán su primera inspiración en su padre o en su madre. Qué orgullo si es así. Me siento me siento afortunado de ser 1 de ellos. Cada día pienso en ellos, en lo que harían en mi lugar ante una dificultad.

Xavier Marcet:

Otros los encontrarán en los maestros. Tuve profesores, pero tuve algunos grandes maestros. En mi escuela, en los escolapios de Tarrasa, el señor Raydein, y el para mascaró, en la universidad, el el catedrático Josep Fontana, y después en Berkeley, el que después ha sido un gran amigo, Henry Chasebrook. Les digo los míos, la lista es más larga, pero no les digo estos, pero cada 1 tiene los suyos. Otros encontrarán la inspiración en sus primeros jefes, aquellos que les dieron oportunidades que iban más allá de su convencimiento.

Xavier Marcet:

Otros los encontrarán en gente sin ningún cargo, pero con luz propia, con sabiduría natural. Otros se iluminaron con algunos que les hicieron preguntas, que les multiplicaron más ansias de crecer y aprender. Otros descubrieron el poder de la bondad y la enorme tranquilidad que confiere la honestidad. Tenemos que reconocer a los que nos inspiraron, a los que nos hicieron crecer. Hay gente que no sabe reconocer a aquellos que le hicieron crecer, esa gente nunca verá como un orgullo tener sustituto.

Xavier Marcet:

Siempre lo verá como una amenaza. Es la generosidad la que nos hace crecer. La arrogancia solamente nos vuelve mediocres. Para liderar sirviendo a los demás, no hay que haber estudiado en una gran escuela de negocios. Hay que haber tenido la humildad de aprovechar a los que nos brindaron su generosidad para permitirnos crecer y saber acordarlos de ellos.

Xavier Marcet:

El día que sentimos el orgullo y no la amenaza de tener un sucesor, ese día, ese día hemos subido peor daño. Liderar es asumir la complejidad sin miedo a la incertidumbre. Es entender que lo importante es crecer haciendo crecer. El management humanista no es una teoría bonita, es una práctica exigente. Menos artificio, más autenticidad.

Xavier Marcet:

Menos procesos vacíos, más propósito real. Este podcast existe porque en inusual sabemos que el liderazgo nos enseña, se vive. Seguimos en el próximo episodio.

Creadores e invitados

Xavier Marcet
Anfitrión
Xavier Marcet
Founder and President en Barcelona Drucker Society | Pt Lead To Change
El orgullo de tener sustitutos